Iris: un barco con varios nombres para engañar en el Acre – Opinion – 20.5.2012
Ricos yacimientos auríferos, abundancia de recursos madereros, principalmente el árbol del caucho formaban parte del territorio del Acre, antes de la guerra.
La gran demanda de caucho a fines del siglo XIX por la industria del automóvil europeo fue uno de los motivos por los cuales se inició el conflicto entre Bolivia y Brasil.
Para controlar este comercio en enero de 1899 se fundó la Aduana de Puerto Alonso. La Aduana estaba situada sobre el río Purus, frente a la población brasileña de Caqueta, justo debajo del límite de la nueva línea de fronteras Cunha-Gómez con el Brasil.
El gobernador del Estado del Amazonas, Ramalho Junior, no vio con buenos ojos el establecimiento de la Aduana y acusó ante su gobierno la “ilegalidad” de la ocupación.
La guerra se dividió en dos periodos o campañas: el primero comienza desde 1899, con la intimación de los brasileños para que abandonen los bolivianos Puerto Alonso hasta su posterior recuperación y reincorporación del Acre nuevamente a Bolivia; la Segunda Revolución Acreana (Segunda Campaña en Bolivia) comienza en 1902 y termina en abril de 1903 con la firma del tratado.
En la primera etapa, Bolivia mandó al Acre tres columnas de soldados que salieron de La Paz por la ruta del río Beni. Poco después, tropas al mando del vicepresidente Lucio Pérez Velasco, salieron desde Cochabamba por la ruta del Chapare, y el ministro de Defensa Ismael Montes encabezó otro contingente por Larecaja y lograron restablecer el orden en la zona.
En esta primera etapa se destacaron los combates de: Papirí, Cajueiro, Combate de Amapá y Humaitá y el de Riosinho y Puerto Alonso.
El segundo período fue durante la presidencia de Manuel Pando, que animó a compañías extranjeras para explotar las riquezas del Acre y asegurar así la soberanía boliviana para evitar levantamientos. Para ello, se realizó un contrato con la empresa estadounidense The Bolivian Syndicate firmándose el Tratado de Aramayo. La cancillería de Brasil y la del Perú reaccionaron airadamente pidiendo explicaciones formales sobre la presencia de la compañía boliviana-estadounidense en el Acre. Fue de esta manera que se dio la batalla de Bahía donde los brasileños ocuparon el territorio del Acre y parte de Pando, tras la batalla de Puerto Rico finalmente Bolivia no pudo resistir los ataques y terminó firmando el Tratado de Petrópolis, en el que se cedió al Brasil una superficie de 191.000 km2.
IRIS
Uno de los detalles de esta guerra es que cuando el militar austrohúngaro Arthur Posnansky se unió al ejército de Bolivia con su lancha de nombre Anni, a la que rebautizó con el nombre de Iris para la guerra. La nave fue vital en batalla, ya que el diseño estratégico y personal del joven ingeniero naval la hacía muy versátil y práctica en combate.
El Iris dio apoyo logístico y transportó al personal, evadiendo a los revolucionarios para no ser capturados, además presionó y hostigó al enemigo.
Durante la guerra, Posnansky volvió a Europa para reconfigurar su nave y ponerla nuevamente en batalla. El gobierno brasileño que quería secuestrar la lancha logró capturar a Posnansky, pero poco tiempo después éste logró su libertad.
Con el apoyo de éste militar, por primera vez en la historia de Bolivia se desarrollaron operaciones navales de carácter fluvial y ribereñas.
Al finalizar la guerra, Posnansky fue declarado héroe nacional y reconocido por el apoyo desinteresado que prestó a Bolivia durante la guerra prestando su nave y donando inclusive víveres y armamento.
El buque Iris recibió el nombre de Tahuamanu, y luego de la guerra pasó a servir al ejército nacional en dos campañas internacionales: la defensa de Manuripi (con Perú) y la Guerra del Chaco, trasvasando a la Cuenca del Plata en esta última. El barco todavía es conservado y permanece en la localidad de Riberalta en el Beni como una reliquia.
Datos acerca de la guerra.
El Tratado de Petrópolis
A cambio del territorio del Acre Bolivia recibió por el Tratado de Petrópolis la cifra de 2 millones de libras esterlinas. También se acordó la construcción de un ferrocarril entre las ciudades de Riberalta y Porto Velho, para la exportación del caucho de aquella época, pero no fue cumplido por las condiciones del terreno.
Viajes de las tropas tardaban meses
Las tropas que participaron de la Guerra del Acre salían de La Paz y tardaban en llegar hasta tres o cuatro meses a la zona de combate. La mayor parte iba a pie y atravesaba las selvas. El clima era hostil a los soldados y se lamentaron bajas por enfermedades y agobio, era una lucha en un escenario extraño.
Fuente: http://www.opinion.com.bo/opinion/informe_especial/2012/0520/suplementos.php?id=3083
esto es sentirce un buen beniano
La idea de crear un pequeño “museo” en torno a la historia de Riberalta y la región amazónica, para ilustrar -no sólo para los turistas extranjeros sino para las nuevas generaciones- los orígenes de lo que fue primero asentamientos elementales, podría, quién sabe, inspirar a más de un amante de estas comarcas. No sé qué exista, y recuerdo haber visitado una especie de Casa de la Cultura donde se exponían fotos antiguas de personajes, notables y pioneros. En todo caso, si no existiera, no se podría pensar en exponer en un local, entre otros, un siringuero modelado en madera, papel con engrudo o lo que sea, en el proceso de confección de la bolacha de caucho a partir de la savia recolectada? No sin dejar de lado idealismos, pues para mí que habría que hacer notar que para esa gente la vida era fiebre, sudor y serpiente. Cuestión que la juventud no crezca creyendo que lo que tiene ahora hubiera caído del cielo o que siempre hubiera sido así como es ahora.
Tener un vestigio del pasado es importante, pero no cabe duda que la placa proyectada para reseñar la historia que hay detrás del casco de fierro será un complemento importante. (Imagínese llegar uno a admirar la pirámide de Kéops en Egipto y no tener un guía que nos cuente lo que representa dentro de la deslubrante civilización del Nilo!) Su trabajo de investigación histórica, Don Remberto, es en todo caso encomiable y merece el aplauso más sincero.
En cuanto a mi pregunta sobre el destino de los otros vapores que surcaban esos ríos, no tiene usted información al respecto? No se los ha podido salvar de su desaparición completa? O habría forma de hacerlo añadiéndolos algún día a la “Tahuamanu”? Un poco como En Guajara-Mirim, donde es interesante poder admirar locomotoras del desaparecido ferrocarril Madeira-Mamoré.
Compatriota. Me encomendaron redatar la historia de la Tahumanu, aquella que estará en una plaqueta en el Paseo que pronto se inaugurará, en principio me confundí con Anny, Iris, Ma da Agua y posteriormente Tahuamanu. Pero luego de una investigación más profunda las conclusiones son que la Tahumanu fue siempre tahumanu, aunque cambio de dueño, se la trajo en navios mercantes y luego en otros barcos hasta Cachucela Esperanza y posteriormente al Astillero de Barracón… Maldonado Leoni, hace esa referencia en una investigación sobre Posnansky, pero ni el mismo se animó a corroborar la versión de los cambios de nombres.
Mejor adjunto lo que dirá , que fue lograda con el apoyo del Dr. Ferrufino. en la plaqueta dirá:
La emblemática Lancha Tahuamanu
Fabricada en Alemania el año 1889 y ensamblada en el Astillero “Florida” del Barracón Orthon, propiedad de la firma The Orthon And Co. asociada a la Casa Vaca Díez, ubicado próximo a las confluencias de los ríos Beni y Orthon. Hizo su primera travesía de prueba el 10 de diciembre de 1899 en el río Beni.
Adquirida por la Casa Suárez, el año 1900 participó transportando tropas militares y alimentos para la Campaña del Manuripi contra el Perú; entre los años 1900 al 1904 en la Guerra del Acre frente al Brasil, trasladando soldados y voluntarios desde Riberalta a Puerto Rico y Porvenir. El año 1903 pasó a depender del Estado Boliviano; entre los años 1932 al 1935 durante la Guerra del Chaco con el Paraguay, transportó a los combatientes desde Cobija y sus alrededores hasta Riberalta y luego a Cachuela Esperanza.
En la década del 70, en virtud a sus patrióticos merecimientos, el Gobierno Nacional la condecoró con el “Condor de los Andes” declarándola además “Generala de la Nación” y “Reliquia Histórica y Monumento Nacional”. El 23 de marzo del año 1989 fue entronizada en el Parque Mirador. Su último técnico fogonista fue el Sr. Carlos Cossío Salvatierra.
Riberalta, mayo de 2012
Qué pasó con los cascos de los vapores “Francia”, “Helvetia”, “Triunfo”, “Pimpi” y otros? No hubo manera de recuperarlos para un museo al aire libre junto al casco del vapor “Tahuamanu”? Qué lástima, no?